Escrito por: Equipo SO

• Iron Spell
• Electric Conjuring (2016)
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“New Wave Of Traditional Heavy Metal”. Ese es el nombre con el que los genios de la internet decidieron rebautizar a lo que antes conocíamos simplemente como heavy metal, con la idea de agrupar a las bandas nuevas que siguen ondeando la bandera. Aunque los chilenos de Iron Spell hayan decidido usarlo para catalogar su música, con “Electric Conjuring” lograron seguir su propio ritmo y zafar de los clichés que plantean los movimientos revival en el rock.

Lanzado en 2016, este es el primer disco completo del conjunto después del EP “Heavy Metal Witchcraft”. Además del trabajo detallista en las composiciones que son interpretadas impecablemente, la producción y el sonido suenan a un nivel profesional. Eso, junto a sus letras en inglés, les valió una buena recepción en el extranjero. En Chile, por supuesto, aún en 2019 nos estamos enterando.

El álbum está lleno de personajes y monstruos, historias épicas y, por sobre todo, potencia de principio a fin (sin pausas para baladas, un aspecto que bien decidieron no abarcar… por ahora). “Ave Zulbah” es el apoteósico inicio que carga la electricidad para “Torches In The Woods”, un golpe de power metal sucio y oscuro. “Night of The Mothman” ataca con actitud rocanrolera, aunque la trama de un hombre polilla resulte poco atemorizante al principio, la convicción con que toca la banda hace creer y enganchar.

La marcha dura de “The Witch” saca a relucir el talento de su vocalista, con un rango bien diverso y con mucho carácter dramático que transmite con ganas el espíritu de la canción. “Under the Iron Spell” es un instrumental con influencias de UFO y, por supuesto, Iron Maiden, en un andar acelerado de riffs galopantes.

“Stormrider” irrumpe con una moto monstruosa saliendo de los pulmones del infierno, sonando pesada y realmente malvada, mientras se muestra una impecable armonía entre los guitarristas en los solos. “Black Candle Light” arranca el speed metal (sin caer en lo happy metal), con un intenso trabajo de guitarras afiladas. “We Are Legion” es la canción guerrera obligada en el género, una dura pero melodiosa arenga a la Manowar que logran sacar con sello propio.

En “Evil Gypsy”, se muestran confiados en tocar fuerte con un estilo más actual y original, sin dejar sus influencias de raíz de lado, mientras que “Moonlight Maniac” aplica una regresión a lo ochentero. Después de una secuencia que intenta sonar del terror, “Castle of Punitore” es un tema super elaborado que experimenta en lo electrónico, con sintetizadores y efectos que arman una escena nítida dentro de un castillo de torturas.

Aunque después de 3 años aún no se pronuncian con un disco nuevo, Iron Spell siguen haciendo shows en vivo y bien activos, lo que podría indicar que algo podría venirse. De todas formas, “Electric Conjuring” aún tiene mucho terreno dónde difundirse mientras la banda prepara su regreso discográfico.