Fósil

Escrito por: RodForChoice

Fosil 10 años El pasado sábado 22 de agosto, la Sala Master de la Universidad de Chile se repletaba puntualmente. Solamente unos pocos rezagados llegamos al filo de la hora. La mayoría del público había llenado las butacas con ansiosa precisión y el nerviosismo se respiraba en los rostros de la familia. Tras el escenario, los cinco protagonistas de la noche se preparaban para el mejor concierto de su trayectoria.

21.00 horas en punto. Se apagan las luces y, tras un ferviente aplauso del respetable, salen los padres de “El Blanco Viajero” (2011) y “Prende el Fuego” (2014) envueltos en un silencioso sentimiento de alegría contenida. Un par de miradas, Luis marca y prenden el fuego con «Canción de los Elementos».

En su primera década, Fósil puso la vara alta en la escena del rock progresivo de folclore. Quizás muchos pudieron haber intentado mezclar charangos, quenas y quenachos con guitarras hiperkinéticamente distorsionadas, con bajos danzantes y baterías virtuosas, pero nadie había recitado «La Biblia» con tanta verdad.

Terminan esas dos primeras y Camilo nos evidencia la emoción del grupo. Un saludo corto y «Fosiles» da pie para un adelanto de lo nuevo; «Lágrimas de otoño».

A pasos del escenario, en primera fila, había una hermosa niñita de unos de 4 ó 5 años que aplaudía y bailaba con cada riff, mientras grababa con su cámara y se reía con los chascones del lado diestro del escenario. Bajo ella, se instalaban poco a poco los más apañadores que se quedaron sin asiento.

Respeto a Fósil desde que los escuché por primera vez, aunque admito que no me gustaron de inmediato. He tenido la suerte de compartir escenario con ellos en distintas instancias, pero terminé de conectarme con su fuego y sus líricas luego de escuchar su último disco, especialmente con “Masticando la Capital” y ¡puta que sonó la raja esta noche! ¡Gracias!

“Camisa Blanca” aparece como la segunda sorpresa de la noche. Otro adelanto de lo nuevo que viene. La prosa refinada de una lírica impredecible y espontánea me deja pensando; “con razón se toman su tiempo para cada disco”. Termino entusiasmándome más de la cuenta y empiezo a flotar paulatinamente. Ya sobre el respaldo de la silla y apoyado en la pared, no tenía idea de lo que iba a venir, ese piano brillaba como si quisiera sonar.

¿QUÉ SON DIEZ AÑOS?…

“Pase lo que pase…si es que uno hace las cosas desde aquí (se toca el pecho, apuntando al corazón)…el resto da lo mismo. Hay que echarle pa’ elante”, dijo con la voz entre cortada y evidentemente emocionado el chascón con charango al cuello y quena a los pies. Invitan entonces a los primeros músicos y a continuación vivimos algo sublime. Excelencia y calidad. De aquí en adelante me sentí testigo de una especie de un “Congreso de Exportación” de los Fósil.

Luis cede las baquetas y se sienta entre el público. Toma agua mientras Nicolás Moyano, antiguo baterista de la banda, se sienta entre aplausos. Al mismo tiempo, por el lado izquierdo del escenario, se posa en el banquillo del piano un imponente Raúl Cruzat, casi medio segundo después aparece en el centro del escenario Keko Hermosilla con un saxo en frente.

Si ya la escena era buenísima, la sonoridad ¡laaaa caaagó! Elegancia y equilibrio entre matices de una inolvidable versión de “Sé lo que me gusta”. Esa conexión con la naturaleza y toda la mística que engloba la música de estos hippies del nuevo milenio termina de sorprender hasta mi vecino de butaca, hombre que se desvirgaba de esta sobrecogedora experiencia en vivo.

Subimos con fuerza en las escalas de esos vientos hacia el final de esa canción que nos mueve entre riffs de potentes guitarras y volvemos a caer cuando el sol se ha ido. Bajamos a comenzar otra vez…una y otra vez, entre contrapuntos de vientos armónicos.

No sé realmente cuándo comenzamos a aplaudir, pero no había terminado el tema y la gente se mandó la primera gran ovación. Nicolás devuelve las baquetas a Luis, mientras Moncho mira con complicidad a alguien entre el público. Comienza entonces el arpegio de “Nuevamente”, casi como si avanzáramos todos juntos galopando entre blancos viajeros.

Cada paso en la vereda de los 10 años de Fósil es como un diagrama de lo que se debe hacer para emerger y comenzar a flotar en este océano de ilusiones. De aquí en adelante dejé los apuntes a un lado y fue absurdamente potente la pasada del setlist. “Del otro lado” me atrapa entre armonías a dos voces equilibradas y bien marcadas por parte de Cristóbal, creciendo con ese violonchelo fastuoso sobre la negra falda de Anto Aguirre.

“Alas” y “Árbol” parecían engrandecerse con las voces emocionadas entre la audiencia. Este es momento de vivir… solo quiero estar… Nunca antes había emocionado, reído y cabeceado y disfrutado tanto un concierto de estos weones. Desde esta pequeña vitrina, acepto su regalo cabros y estoy aquí, conectado con su lírica y su música que me entregan más ganas que nunca de seguir escuchando de cerca los Sonidos Ocultos y toda su comunidad.

EL VIAJE EN ESPIRAL

“Lo que se hizo Ayer” y “Vagabundo” reflejan la bipolaridad sonora de estos poderosos animales fosilizados. No recuerdo en cual fue exactamente, pero todos fuimos testigos de la cabellera de Matías explotando en una enfermiza y armoniosa expresión de fuerza centrífuga de sus cuerdas, todo sobre un groove muy pulento del huaso.

El sonido es sólido. Recalco, sonaron la raja. Aplausos para el tremendo sonidista que llevaron. Con siguiente tema dan ganas de abrazarse en pareja. Es que el amor y la dulzura de este temazo hace que me acuerde “De ti y de mí». Hacia el final del tema el solo de la guitarra vuelve a reventar entre aplausos y, siendo honesto… ahora me entró la duda si fue aquí o antes cuando su cabeza parecía centrífuga.

En fin, el concierto va terminando y es turno para cerrar este “Viaje” entre fumadas y fumadas, viajan por nosotros con toda la onda de uno de los mejores temas de los cumpleañeros. ¡Puta que es wena la batería en el final de este viaje y como va acentuándose con el riff pegote! Son como 60 compases de cabeceo y se agradecen.

A esta altura, el incendio era evidente porque el fuego lo prendieron hace rato. La verdad es que estaba seguro de que iba a ver un concierto de calidad, pero la sorpresa de la sonoridad de esta primera década fosilizada me hizo terminar aplaudiendo y gritando de pie hasta compartir esa alegría con un sincero sentimiento de respeto. Gracias.

Setlist:

1.      CAPITAN PLANETA
2.      LA BIBLIA
3.      FOSILES
4.      LAGRIMAS DE OTOÑO
5.      MASTICANDO LA CAPITAL
6.      CAMISA BLANCA
7.      SE LO QUE ME GUSTA
8.      NUEVAMENTE
9.      DEL OTRO LADO
10.  ALAS
11.  ARBOL
12.  LO QUE SE HIZO AYER
13.  VAGABUNDO
14.  DE TI Y DE MI
15.  VIAJE
16.  PRENDE EL FUEGO

Fotos: Rod For Choice /Archivo SO

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