Si bien, la escena musical chilena ha sufrido un aparente estancamiento en cuanto a proyectos musicales visibles debido a una multiplicidad de factores, de una u otra forma las inquietudes personales siempre son más penetrantes que el status quo. Es así, como a finales de la década recién pasada un sinfín de bandas con la bandera del rock a tope han desafiado al mainstream criollo, generando una amplia camada de nuevos exponentes que a punta de autogestión y toneladas de ganas han consumado piezas creativas que transitan mano en mano y boca en boca de quienes miran de vez en cuando lo que pasa en subsuelo nacional.
Una de aquellas bandas es Enemigo, quien con su EP titulado “culpas” nos muestra parte del trabajo del grupo chileno que viene haciendo historia desde el 2008 con una propuesta acorde a la era digital en la que nos situamos: distribución, publicidad y posicionamiento utilizando casi en forma exclusiva las redes sociales como un instrumento canalizador de los recursos del proyecto. De esta manera Enemigo cuenta con miles de descargas de sus EP, todos disponibles en www.enemigo.cl. La banda cuenta en sus puestos con Patricio Maripani en voz y guitarra, Carlos Hernández en Bajo y voces, y Luis “pollo” Rivera en batería quienes realizan una interesante y contundente búsqueda en el campo del rock y el pop.
Continuando con “Culpas” tiene como primeros 2 tracks un tema que comparte el mismo nombre que titulo con el EP, y “Ni juegos ni sueños” donde la veta hardrokera de Enemigo queda expuesta de gran manera en un riffs de guitarra que pone en alerta al auditor en forma instantánea y que al desarrollarse, invita al bajo y la bataca a construir la estructura del tema ya sea al unísono o vía fills.
Los hamonds contribuyen en la entrega de color necesario para contextualizar al estilo, llevando a la entrega presente hacia ese rock que nos vio crecer y nos enseño a como se deben hacer las cosas; con actitud. El tercer tema del EP, “Dormir sin ti” si bien, se aleja (momentáneamente) de la línea del los 2 primeros tracks, muestra una búsqueda estética particular en donde las armonías se aventuran a los lugares que los riffs simplemente no pueden llegar. El coro reviste a la canción con el poderío ya exhibido en la primera mitad del disco, donde las distorsiones dan en el clavo para hacer cuajar la mezcla y entregar un buen trabajo compositivo.
“Culpas” se despide con su cuarto track, titulado “Traicion” y que se consolida como una gran balada, con un potencial de poder permitirse ser banda sonora de muchos instantes fílmicos. Un vaivén en dinámicas; un canto emotivo, una invitación intima al interior del compartimento más sensible de la banda. Los textos se constituyen en torno al tema más cotizado de la historia: el amor, motivo siempre manoseado y que si bien, conceptualiza el eje temático de Enemigo, no ayuda a la definitiva diferenciación en cuanto a ideas literarias. Se destaca la voz característica de Maripani que ayuda enormemente al no hacer referencia a otros vocales y buscar su propio estilo entregándole a Enemigo algo fresco y natural.
Aunque la grabación propiamente tal no cuenta con los standares de una gran producción (sin embargo hay que alabar el diseño del arte del disco que ya se lo quisiera cualquier otra banda), se las arregla para sonar bien y dejar en claro cuáles son las intenciones de la banda: ganar metro a metro en su carrera y posicionarse con un sello distintivo y diferente en la escena emergente y quién sabe, catapultarse a la anhelada visibilidad de medios masivos en un futuro ojalá próximo. Nosotros al menos creemos que eso es posible. Y mucho más.