Escrito por: RodForChoice

• Leo Badinella
• Beyond Conciousness
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Si no te gustan los guitarristas puedes cerrar esta página de inmediato, pues “Beyond Conciousness” es el primer disco de estudio del talentoso Leo Badinella. Aunque debo confesar que yo era uno de esos prejuiciosos anti-guitarristas

Por lo general, cuando la gente lee un libro casi siempre olvida el prólogo. Incluso hay autores que lo omiten, pero por suerte Leo Badinella no es uno de ellos, pues incluye su propio “Prologo” de manera eficiente como una pieza introductoria a su música, logrando demostrar, en poco tiempo, de qué se trata su trabajo sin abusar ni agotar ningún recurso.

Cargado de riffs pesados y metaleros, “Infinite substance” demuestra virtuosismo y pulcritud en su ejecución, acompañado de una poderosa y firme batería. Inmediatamente aparece “Ritual”, una pieza distinta a la anterior. Mucho más melódica y con un bajo que insinúa ansias de balada que más más tarde confirmaría una exquisita guitarra acústica.

Sin darme cuenta, han pasado quince minutos e irrumpe un riff que parece expresarse por sí solo, “Kat Kat Katan” es el argumento perfecto para decir que los discos instrumentales sí funcionan. Le sigue “Contrastes”, con todos sus redobles y tresillos, sin dudad, el piso menos digerible para un paladar mañoso. No obstante, es un escalón fundamental para comprender la pirámide musical de Badinella.

Justo en la mitad, los invito a no hacer otra cosa que detenerse y quedarse quietos, “Mirando al cielo”, un tema que puede cambiar su apreciación de acuerdo al clima imperante. Con “Escape” se vuelve a inferir que en sus venas corre mercurio y no sangre como en el resto de los mortales.

Un verdadero desafío, al menos para mí, ha sido escuchar un disco instrumental ajeno a mi estilo y gusto musical, sin embargo, con “El Reto” consigo interiorizarme y adentrarme por primera vez más allá de la conciencia, alcanzando y comprendiendo la coyuntura propia de composiciones hechas con complejidad y sapiencia.

Finalmente, “Balance” y “Elypse” cierran solemnemente casi una hora de verdadera música de categoría. Realizada de manera independiente, consiguiendo incluso la colaboración de músicos extranjeros que han sabido valorar la calidad que existe en las cuerdas y los sonidos de este gran artista oculto.